Azahara Prieto, Talent Acquisition Manager de Alhona, comparte en esta entrevista su visión sobre los aspectos clave de la atracción, selección y fidelización de talento en empresas tecnológicas como Alhona, destacando especialmente la importancia de ofrecer una buena experiencia al candidato y al empleado.
¿Cuáles son los retos de crecimiento del equipo en una compañía con perfiles tecnológicos e industriales?
En cualquier compañía, especialmente las orientadas a industria y tecnología, hay un reto de base que es atraer a personas muy cualificadas técnicamente. Además, en Alhona, donde contamos con perfiles así, es clave enfocarnos en mantener un alto nivel de excelencia a medida que crecemos, asegurar que las personas que se vayan incorporando sumen al equipo. Y para ello, hay que tener una buena estrategia de atracción de talento y cuidar la experiencia de los empleados.
¿Cómo dirías que han evolucionado los procesos de selección en los últimos años?
Creo que un cambio muy positivo que ha sucedido en los últimos años es el hecho de que las empresas han tomado conciencia de que es un proceso de conocimiento mutuo que debe hacerse de igual a igual, ya que en la mayoría de las posiciones que buscamos hay competencia por el talento.
Evidentemente, en ese proceso tenemos la oportunidad de conocer al candidato y decidir si es la persona que queremos incorporar al proyecto, pero también esa persona tiene la capacidad de conocernos y elegir si ve nuestra compañía como el lugar adecuado para su próxima etapa profesional. Por eso, el proceso de selección debe hacerse de manera cercana, humilde y empática, ofreciendo a los candidatos un espacio en el que poder mostrarse como realmente son y decidir también si se ven trabajando contigo.
Por otro lado, hay iniciativas que nos facilitan mucho las cosas a la hora de atraer talento, como nuestro programa referral, en el que valoramos y gratificamos a los empleados de Alhona cuando se incorpora al equipo alguien que han recomendado. Creo que tener un programa referral es muy positivo, porque los empleados funcionan muy bien como embajadores y referentes para personas con las que han trabajado y quieren trabajar con ellos de nuevo.
¿Cuáles son las mejores prácticas para ofrecer una buena experiencia al candidato?
Lo esencial en los procesos de selección de Alhona es tratar bien a los candidatos que aspiran a formar parte de nuestro equipo. Por eso, siempre tratamos de llevarlos a cabo con agilidad, buena comunicación y transparencia.
Empezamos por redactar ofertas de empleo detalladas en las que puedan hacerse una idea lo más clara posible de cómo es trabajar con nosotros, incluyendo también los beneficios que ofrecemos. Intentamos que el número de entrevistas sea razonable y no agotador para el candidato, que al fin y al cabo nos está ofreciendo su tiempo, y que pueda conocer a las personas con las que va a trabajar más de cerca. Procuramos tener a los candidatos bien informados sobre los tiempos y próximos pasos, y de avisarles si hay cualquier contratiempo. De esta manera, tenemos una muy buena ratio de ofertas aceptadas.
Y, una vez finalizado el proceso de selección, ¿cómo cuidáis la experiencia de los empleados?
En Alhona todos trabajamos en remoto, pero el onboarding siempre lo hacemos en alguna de nuestras oficinas en Bilbao o Madrid, para que la nueva persona que se incorpora pueda tener una experiencia más cercana y un contacto más directo con sus compañeros de trabajo en los primeros días.
Además, organizamos reuniones con los responsables de todos los departamentos para que les expliquen de primera mano todo lo que hacen en cada uno de ellos, proyectos actuales y de futuro.
Por último, tratamos de asegurar que cada empleado tiene una comunicación cercana, fluida y constante con sus managers y desde el equipo de HR trabajamos en crear el marco adecuado para que las personas puedan dedicarse a su trabajo sin tener que preocuparse mucho por otras cuestiones. De este modo, intentamos facilitar todo lo posible el día a día con herramientas y beneficios orientados a su bienestar. Además, el hecho de poder trabajar en remoto y con mucha flexibilidad es algo que todos valoramos. Para no perder la visibilidad sobre la actividad de los diferentes equipos, organizamos all-hands periódicos, y también hacemos Random Coffees, reuniones con un carácter más lúdico donde hablamos de cualquier tema con compañeros de la organización con las que no tenemos trato diario.